Tributo a Ramón Escudeiro
Tilve.
El nombre de Ramón Escudeiro Tilve es una Lección de Vida,
de coraje, tenacidad y todos las mejores cualidades de las que puede tener un
ser humano.
Es un ejemplo en
valores fuera de toda duda, que merece y debe conocerse.
Si los éxitos deportivos de Ramón, teniendo en cuenta la
lucha que sostenía diariamente contra su salud, hubieran sido en otra rama
deportiva, seguramente hubieran tenido el eco mediático de la prensa nacional
que por mucho menos, y muchas veces por nada, encumbren figuras que ponen
como
ejemplo a seguir.
No había cumplido dos años cuando tiene que enfrentarse a la
más dura lucha, se le van apareciendo tumores, sin respiro de hospital en
hospital, constantes operaciones, pierde la vista, pero gana la gran batalla,
la de la supervivencia.
Su afán de superación superó hasta la mismísima superación.
Siempre dando ánimo y demostrando permanente alegría, ni en
los peores momentos demostró nunca tristeza.
Él sabía perfectamente que iban mermando sus fuerzas, los
tumores reaparecieron, ya con largas sesiones de quimioterapia, con una nueva
operación a vida o muerte donde le
tuvieron que extraer el 60% del hígado, pidió el favor a los médicos para que
le dieran permiso de ir a competir al campeonato nacional juvenil de la ONCE
celebrado en Badajoz, sorprendidos le dijeron que si, siendo palabras textuales
de Ramón - no quiero morir en una cama. Fue su último triunfo en vida, logró
ser nuevamente campeón nacional a pesar de no querer atender sugerencias de
abandonar el campeonato, debido a los
inmensos dolores que padecía, fue su última voluntad que nos brindó una nueva enseñanza de humanidad y lucha.
Al arribar de Badajoz a su Pontevedra querida, no dio tiempo
a más, su esplendorosa llama se apaga en vida.
Su palmarés
deportivo en tan corto tiempo es
impresionante, sus logros traspasaron fronteras y muchos titulares, prueba de
ello que el periodista más prestigioso de ajedrez a nivel mundial; Leontxo
García Olasagasti le dedicó a Ramón su columna en el periódico El País tras su
deceso.
Esos éxitos tuvieron la admiración convertida en grandes
ovaciones por donde triunfaba Ramón, pero su nombre siempre iba ligado a la
Ciudad de Pontevedra, a Galicia y a España, que tan brillantemente
representaba.
Desde Escola Xadrez de Pontevedra, nuestro deber y a la vez
inmenso orgullo, es llevar el nombre de Ramón Escudeiro Tilve, su vida y obra a
lo más alto, adonde merece.
Por ello el torneo "Memorial Ramón Escudeiro
Tilve", de nivel Internacional, debe consolidarse como una de las pruebas
más importante del calendario.
Que estén representadas las instituciones y que puedan
brindar su apoyo para contribuir al mantenimiento y éxito del mismo, sería
imprescindible.
El nombre de Ramón Escudeiro Tilve es una Lección de Vida,
de coraje, tenacidad y todos las mejores cualidades de las que puede tener un
ser humano.
Es un ejemplo en
valores fuera de toda duda, que merece y debe conocerse.
Si los éxitos deportivos de Ramón, teniendo en cuenta la
lucha que sostenía diariamente contra su salud, hubieran sido en otra rama
deportiva, seguramente hubieran tenido el eco mediático de la prensa nacional
que por mucho menos, y muchas veces por nada, encumbren figuras que ponen
como
ejemplo a seguir.
No había cumplido dos años cuando tiene que enfrentarse a la
más dura lucha, se le van apareciendo tumores, sin respiro de hospital en
hospital, constantes operaciones, pierde la vista, pero gana la gran batalla,
la de la supervivencia.
Su afán de superación superó hasta la mismísima superación.
Siempre dando ánimo y demostrando permanente alegría, ni en
los peores momentos demostró nunca tristeza.
Él sabía perfectamente que iban mermando sus fuerzas, los
tumores reaparecieron, ya con largas sesiones de quimioterapia, con una nueva
operación a vida o muerte donde le
tuvieron que extraer el 60% del hígado, pidió el favor a los médicos para que
le dieran permiso de ir a competir al campeonato nacional juvenil de la ONCE
celebrado en Badajoz, sorprendidos le dijeron que si, siendo palabras textuales
de Ramón - no quiero morir en una cama. Fue su último triunfo en vida, logró
ser nuevamente campeón nacional a pesar de no querer atender sugerencias de
abandonar el campeonato, debido a los
inmensos dolores que padecía, fue su última voluntad que nos brindó una nueva enseñanza de humanidad y lucha.
Al arribar de Badajoz a su Pontevedra querida, no dio tiempo
a más, su esplendorosa llama se apaga en vida.
Su palmarés
deportivo en tan corto tiempo es
impresionante, sus logros traspasaron fronteras y muchos titulares, prueba de
ello que el periodista más prestigioso de ajedrez a nivel mundial; Leontxo
García Olasagasti le dedicó a Ramón su columna en el periódico El País tras su
deceso.
Esos éxitos tuvieron la admiración convertida en grandes
ovaciones por donde triunfaba Ramón, pero su nombre siempre iba ligado a la
Ciudad de Pontevedra, a Galicia y a España, que tan brillantemente
representaba.
Desde Escola Xadrez de Pontevedra, nuestro deber y a la vez
inmenso orgullo, es llevar el nombre de Ramón Escudeiro Tilve, su vida y obra a
lo más alto, adonde merece.
Por ello el torneo "Memorial Ramón Escudeiro
Tilve", de nivel Internacional, debe consolidarse como una de las pruebas
más importante del calendario.
Que estén representadas las instituciones y que puedan
brindar su apoyo para contribuir al mantenimiento y éxito del mismo, sería
imprescindible.
El torneo se juega por el sistema suizo a nueve rondas. La organización mantiene el "streaming" para poder contemplar las partidas en directo a través de Internet, en el sitio www.xadrezpontevedra.com. El torneo reparte 2000 euros en premios entre los mejores clasificados.
Ramón Escudeiro Tilve (apodado Ramón E.T.), ciego desde los dos años, falleció en julio de 2012. De su valía da cuenta el hecho de que fue capaz de disputar varias simultáneas de ajedrez y llegó a colgarse la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo junior de Judo para ciegos.
Su repentino fallecimiento, cuando sólo contaba con 20 años, le impidió cumplir su sueño de participar en los Juegos Paralímpicos de Río de enero, en 2016.
Ramón Escudeiro Tilve (apodado Ramón E.T.), ciego desde los dos años, falleció en julio de 2012. De su valía da cuenta el hecho de que fue capaz de disputar varias simultáneas de ajedrez y llegó a colgarse la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo junior de Judo para ciegos.